El vicepresidente J.D. Vance advirtió el jueves que Estados Unidos podría enviar tropas a Ucrania y golpear a Rusia con más sanciones si Vladimir Putin no negocia un acuerdo de paz de buena fe.
En declaraciones al Wall Street Journal, Vance afirmó que la opción de enviar tropas estadounidenses a Ucrania está “sobre la mesa”, así como la imposición de sanciones económicas si el acuerdo de paz no garantiza la independencia de Kyiv a largo plazo.
“Hay herramientas de presión económicas y, por supuesto, militares”, declaró Vance al periódico.
Sus comentarios tienen un tono marcadamente distinto al de otras declaraciones recientes de la Casa Blanca, como las del presidente estadounidense, Donald Trump, que sugirió esta semana que Ucrania “puede ser rusa algún día”, poco antes de anunciar que las negociaciones de paz comenzarían inmediatamente después de mantener una llamada telefónica con Putin.
La declaración de Vance también contrasta con la del secretario de Defensa, Pete Hegseth, que ha dicho que Estados Unidos ya no daría prioridad a la seguridad europea y ucraniana. Esta semana, dijo a los aliados de la OTAN que las tropas europeas y no europeas -pero no las estadounidenses- tendrían que vigilar cualquier acuerdo entre Ucrania y Rusia.
CNN se ha puesto en o con la Casa Blanca para recabar comentarios.
La entrevista del Wall Street Journal se publicó horas antes de que Vance se reúna con el presidente ucraniano, Volodymyr Zelensky, en la Conferencia de Seguridad de alto nivel de Múnich (Alemania).
Este hecho se suma al aire de incertidumbre y ansiedad que ha envuelto a Europa en la última semana, después de que el anuncio de Trump desatara temores de que se pudiera llegar a un “acuerdo sucio” con Putin para poner fin a la guerra en términos favorables a Moscú sin la participación de Kyiv.
A muchos en Europa les sorprendió que Trump pareciera hacer concesiones clave a Moscú antes incluso de aceptar conversaciones de paz. Sus comentarios y los de Hegseth también pusieron en entredicho el futuro de la unidad, los recursos y la financiación de la OTAN, piedra angular de la seguridad europea desde la Segunda Guerra Mundial.
También sorprendió que Trump hablara con Putin antes que con Zelensky y los líderes europeos se apresuraron el jueves a dejar claro que cualquier acuerdo de paz tendría que incluir a Ucrania en el centro de las negociaciones.
Tras el anuncio de Trump sobre las negociaciones del acuerdo de paz, el presidente francés, Emmanuel Macron, también describió su regreso a la Casa Blanca como un “electroshock” para Europa en una entrevista con el Financial Times.
Macron subrayó la necesidad de que Europa refuerce su economía y sus defensas, coincidiendo con la postura de Trump de que la seguridad de Ucrania era responsabilidad europea. Pero también subrayó que sólo Ucrania podía negociar por sí misma, y que cualquier paz que fuera una “capitulación” sería una mala noticia para todos.